Las repoblaciones vegetales persiguen recuperar aquel suelo que, por cualquiera que fuese la causa, ha perdido sus propiedades saludable para generar vida y fomentar la biodiversidad.

Nuestras plantas repobladoras autóctonas y/o adaptadas crecen en condiciones difíciles; ya sea con poca tierra o poca agua o ambas.

Las plantas repobladoras son una buena solución por su crecimiento rápido. Y con una buena aptitud de resiembra permitirán recuperar espacios degradados y difíciles de vegetalizar como puedan ser taludes y corrimientos.

Serán las colonizadoras para crear una cubierta vegetal que tras algunos años podrán acoger otro tipo de plantas. Siempre hay que dejar margen para otras especies que enriquezcan el terreno al perseguir siempre la sostenibilidad.

Lo interesante en la jardinería sostenible es realizar un estudio de la vegetación local y tratar de reproducirla en tu jardín, zona verde. De esta manera, podrás basarte en los factores ecológicos estacionales. Al igual que podrás decidir si realizar un trasplante de planta repobladoras jóvenes o ir a siembra de semilla.

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