14 Ene La sostenibilidad y el futuro

Estamos al comienzo de un nuevo año con una lista de buenos propósitos por conseguir y unos malos hábitos que dejar. Para qué? Para disfrutar de un futuro mejor y aquí es donde entra la connotación «sostenible». Cómo ligamos la sostenibilidad y el futuro? Queramos o no, la sostenibilidad es la diferencia entre tener o no futuro.

Fuente: Harvard Deusto

Al igual que conservamos las tradiciones de nuestra cultura: festejar la Navidad, celebrar la Pascua, disfrutar del veranito,… Debemos mantener nuestra conducta respecto al entorno que nos rodea y mejorar aquellas actividades que fomentan la sostenibilidad para hace posible un futuro mejor. Desde ya ambos conceptos: sostenibilidad y futuro estarán ligados a nuestro comportamiento humano.

Sostenibilidad y futuro en la economía circular

Preservar nuestros recursos: agua, arena, minerales, fauna, flora,… es tan obvio que se nos olvida. La economía circular lleva años entre nosotros pero todavía el sistema productivo no está adaptado a que los productos realmente sigan de la cuna a la cuna (the craddle to the craddle). Pudiendo además distinguir entre medio y largo plazo. Ya que a corto plazo se requiere principalmente inversión I+D+i y por su puesto en todos los niveles de las organizaciones. De esta manera, se conseguirá que la economía circular consiga ahorros y genere beneficios en todos los eslabones de la cadena.

Combinar tradición e inversiones en I+D+i

Ya antiguamente las cosas se hacían de manera sostenible pues se respetaba em medio ambiente. El impacto de los humanos era limitado y se restringía a un ámbito local. Con los siglos y el desarrollo económico el impacto ya alcanzan cotas globales por lo que si retomamos las tradiciones saludables para el planeta Tierra con los resultados de una buena inversión en I+D+i es cuando cobra más sentido nuestra máxima de que la sostenibilidad será el factor determinante para tener o no tener futuro.

Fuente: YKK España, SA

Programa de inventivos atractivos para las compañías

Para que todo esto tuviese recorrido es clave la clase política. Los gobiernos deberían establecer programas de incentivos lo suficientemente atractivos para motivar todos los cambios que la mayoría de las empresas actuales requieren realizar y que no los posterguen por beneficios inmediatos. Y sobre todo, evitar el mal amigo «greenwashing». Las compañías comprometidas recibirán un retorno dentro del triángulo de calidad-seguridad-medioambiente.

Adiós a la obsolescencia programada

Como hemos comentado antes, volviendo a nuestras eras pasadas, la fabricación tiene que recuperar su rasgo de durabilidad rechazando el consumismo compulsivo. Producir objetos que duren «toda la vida» mejorando su reciclaje o segunda vida será el éxito por alcanzar de las futuras marcas. En aquellos países y sectores donde se fomente y se simplifique el reutilizar recursos experimentarán un desarrollo económico positivo. Poco y bueno versus mucho y barato. La responsabilidad ética es otro factor a tener en cuenta como veis.

Transferencia de conocimientos más ágil

La educación es siempre una cuestión de debate cuando no lo debería ser nunca! Para que un país, al igual que en una empresa, el acceso al conocimiento debería ser facilitado y de transmisión super ágil. Todos conocemos la brecha existente entre la universidad y el mundo laboral… Y no olvidar que con la colaboración se avanza más y mejor. El sector público y el privado (incluso entre privado-privado) deberían ir de la mano; con una misma línea en el horizonte y conectados para que se respetar la economía circular en todos los niveles.

Fuente: Becas Santander

Como parque ecológico, nosotros ponemos nuestro granito de arena para la conservación del medio ambiente. La permacultura se respira en todas partes. Apostamos a caballo ganador siendo la sostenibilidad nuestro caballo para tener un futuro mejor que dejar a la generación.